Imanol Arias, acosado

Imanol Arias, que paseaba el otro día en un parque, entre los árboles, muy tranquilo él, y muy bucólico y pastoril, se topó con un par de estos que, cámara en mano, pretendían pillarlo sin que él se diera cuenta, para después poner en el pie de foto o de imagen alguna invención sobre la triste soledad del actor.

Imanol los vio y los otros le dijeron que estaban intentando sacarle unas fotos, que se dejara, que total ya, qué más le daba, en plan "Dame 'argo' señorito", pues eso. Claro que el otro, harto ya de verlos, les gritó que si querían, les hacía un posado para que lo dejaran tranquilo.

Desde que el actor y su mujer, Pastora Vega, anunciaran hace unos días su separación, a través de un comunicado y pedían respeto a sus personas, no se libran de cámaras y micrófonos, apostados todo el santo día en las puertas de sus casas para averiguar, según dicen estos artistas del cotilleo, los motivos de la separación.

Vamos que un poco más y se los encuentran, grabadora en mano, en la sala de estar de su casa al salir de la ducha y se sientan a la mesa a desayunar.
Si han pedido intimidad y respeto, ¿por qué los resporteros y los que les pagan no lo cumplen? Pues ni los unos ni los otros. Y hasta que no sepan por qué se han separado, no paran.